¿TENEMOS QUE VOLVER A EMPEZAR?
Pues nada; ¡manos a la obra!
Lo primero..., pasemos de los sindicatos de clase socialdemócrata UGT y CCOO, defensores
de una estructura colaboracionista y pactista profesionalizada
integrada en la visión socialdemócrata de la lucha de clases, cuyo pactismo con la patronal e
inacción han contribuido decisivamente a que nos encontremos en esta
situación, pues están comprometidos con aquello contra lo que luchamos.
Lo segundo..., Movilización continua.
Lo tercero..., ni un paso atrás. Nuestros derechos SON POTESTATIVOS, NO OTORGADOS. Nos pertenecen y no son negociables.
Cuarto..., ¡hombro con hombro, mano en la espada, pie en la pared y
espalda contra el muro! No aflojemos el pulso ni un ápice. Todos juntos y
unidos.
Si olvidamos todo esto, si creemos que por haber
cambiado el arado por las furgonetas, las palas por los ordenadores, los
monos por los trajes, la indigencia por las pensiones no contributivas,
somos mejores y más fuertes que nuestros abuelos, entonces estamos
perdidos. Nos barrerán, nos hundirán y nos aplastarán con sus
televisiones, con sus acuerdos salariales, con con sus policías, con los
miedos con los que nos amedrentan. Y perderemos. Así que no te rindas,
levanta y ¡protesta, carajo!